Te has preguntado nunca: ¿qué es la ansiedad generalizada?. La ansiedad es una respuesta natural del cuerpo al estrés. Es una sensación de miedo o aprensión ante lo que está por venir.
Este post es una guía divulgativa general para entender la ansiedad generalizada (o trastorno de ansiedad generalizada).
Va dirigida a todas aquellas personas que la padecen, así como familiares o allegados de estas.
Contenidos
Toggle1. Introducción
El primer día de escuela, ir a una entrevista de trabajo o dar un discurso pueden hacer que la mayoría de las personas se sientan temerosas y nerviosas. Pero en el caso de los trastornos de ansiedad, estos sentimientos son más que temporales y pueden interferir con las actividades diarias.
¿Qué es la Ansiedad Generalizada?
La Ansiedad Generalizada, también conocida como Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG), es una enfermedad de salud mental caracterizada por preocupaciones y miedos excesivos y constantes en diferentes áreas de la vida, como la salud, el trabajo, las relaciones sociales, entre otras.
Las personas con TAG suelen sentirse ansiosas la mayor parte del tiempo sin una razón específica o incluso cuando no hay ninguna amenaza real.
A diferencia de la ansiedad normal o temporal, la ansiedad generalizada es de larga duración y las personas pueden tener dificultades para recordar la última vez que se sintieron relajadas.
A medida que la ansiedad se intensifica, puede dominar la vida diaria interfiriendo con el trabajo, la escuela, o las relaciones personales, lo que lleva a un ciclo de preocupaciones, miedo y ansiedad aún mayor.
2. Entendiendo la Ansiedad Generalizada
La ansiedad generalizada es un trastorno con una gran variedad de síntomas y causas. Veamos pues con detalle cada uno de estos apartados.
Síntomas de la Ansiedad Generalizada
Los síntomas pueden variar en intensidad y frecuencia de una persona a otra, pero generalmente incluyen los siguientes:
- Preocupación constante y excesiva sobre diferentes actividades y eventos.
- Dificultad para controlar los sentimientos de preocupación.
- Inquietud o sensación de estar «al límite».
- Fatiga fácil o cansancio constante.
- Dificultad para concentrarse, o sensación de que la mente está «en blanco».
- Irritabilidad.
- Tensión muscular.
- Problemas de sueño, como dificultad para conciliar el sueño, sueño inquieto o pesadillas.
- Síntomas físicos como palpitaciones, sudoración, temblores o mareos.
Es importante recordar que estos síntomas deben ser persistentes y durar al menos seis meses para que se pueda hacer un diagnóstico de Trastorno de Ansiedad Generalizada.
Causas de la Ansiedad Generalizada
Las causas exactas no se conocen completamente, pero se cree que una combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales juegan un papel importante. Algunos de estos factores pueden incluir:
- Factores biológicos: Las investigaciones sugieren que las personas con Trastorno de Ansiedad Generalizada pueden tener cambios en la actividad cerebral que controla las emociones.
- Genética: Los trastornos de ansiedad, incluyendo el TAG, y otros como la depresión, pueden ser hereditarios. Las personas con familiares que tienen trastornos de ansiedad tienen un mayor riesgo de desarrollar TAG.
- Factores ambientales: Eventos o experiencias traumáticas, como el abuso, la muerte de un ser querido, el divorcio o el cambio de trabajo o escuela, pueden desencadenar el TAG. El estrés crónico también puede contribuir al desarrollo de este trastorno.
¿Cómo afecta a la vida diaria?
La Ansiedad Generalizada puede tener un impacto significativo en la vida diaria de una persona. Puede afectar el rendimiento en el trabajo o en la escuela, las relaciones personales y la calidad de vida en general.
Las personas con TAG pueden tener dificultades para realizar tareas diarias y pueden evitar situaciones que les causen ansiedad. Esto puede llevar a problemas en el trabajo o en la escuela, y puede limitar las actividades sociales y familiares.
Además, la Ansiedad Generalizada puede tener «efectos físicos», como problemas de sueño, fatiga, dolores de cabeza y problemas gastrointestinales.
3. La Biología de la Ansiedad Generalizada
La ansiedad generalizada, como otros trastornos de ansiedad, está estrechamente relacionada con el funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso.
En particular, se ha observado que ciertas áreas del cerebro están involucradas en la generación y regulación de la ansiedad.
El papel del cerebro y el sistema nervioso
Una de estas áreas es la amígdala, que juega un papel crucial en el procesamiento de las emociones y, en particular, en la respuesta al miedo. En personas con ansiedad generalizada, la amígdala puede ser hiperactiva, lo que lleva a una mayor sensación de miedo y preocupación.
Otra área importante es el córtex prefrontal, que está involucrado en funciones de alto nivel como la toma de decisiones y la regulación de las emociones. En personas con ansiedad generalizada, el córtex prefrontal puede no funcionar de manera óptima, lo que dificulta la regulación de la ansiedad.
Además, el sistema nervioso autónomo, que controla las respuestas automáticas del cuerpo, como la frecuencia cardíaca y la respiración, también puede estar involucrado. En situaciones de estrés o miedo, este sistema puede activarse, llevando a los síntomas físicos de la ansiedad, como el aumento de la frecuencia cardíaca, la respiración rápida y la sudoración.
Genética y Ansiedad Generalizada
La genética también juega un papel en la ansiedad generalizada. Se ha observado que este trastorno tiende a darse en familias, lo que sugiere que puede haber una predisposición genética a desarrollarlo.
Aunque aún no se han identificado genes específicos que estén directamente asociados con la ansiedad generalizada, la investigación ha mostrado que ciertas variantes genéticas pueden hacer que una persona sea más susceptible a desarrollar trastornos de ansiedad.
Es importante destacar que, aunque la genética puede aumentar el riesgo de desarrollar ansiedad generalizada, no determina por sí sola si una persona desarrollará este trastorno. Factores ambientales y de estilo de vida también juegan un papel crucial.
El impacto de la ansiedad en el cuerpo
La ansiedad generalizada no sólo afecta la mente, sino también el cuerpo.
Los síntomas físicos de la ansiedad pueden incluir palpitaciones, sudoración, temblores, sequedad de boca, dificultad para respirar, náuseas y mareos.
Además, la ansiedad crónica puede tener efectos a largo plazo en la salud física. Puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión y las enfermedades del corazón. También puede llevar a problemas gastrointestinales, como el síndrome del intestino irritable, y puede afectar el sistema inmunológico, lo que puede hacer que una persona sea más susceptible a las infecciones.
4. Diagnóstico de la Ansiedad Generalizada
Para poder saber si realmente tienes este trastorno, un profesional de la salud mental como un psiquiatra o un psicólogo, tiene que hacer primero de todo el diagnóstico.
¿Sabes cómo funciona este proceso?
¿Cómo se diagnostica la Ansiedad Generalizada?
El diagnóstico se realiza a través de una evaluación clínica exhaustiva que incluye una historia clínica detallada, una evaluación psiquiátrica y, en algunos casos, pruebas físicas para descartar otras enfermedades médicas que puedan estar causando los síntomas.
Al ir al psiquiatra, este realizará una serie de preguntas sobre los síntomas, la duración de los mismos, el impacto en la vida diaria y cualquier posible causa o factor desencadenante. También se preguntará sobre la historia familiar de trastornos de ansiedad o de salud mental.
Para ser diagnosticado con Trastorno de Ansiedad Generalizada según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), una persona debe experimentar preocupación excesiva y difícil de controlar durante al menos seis meses, y tener al menos tres de los siguientes síntomas: inquietud, fatiga, dificultad para concentrarse, irritabilidad, tensión muscular y problemas de sueño.
Pruebas y exámenes para la Ansiedad Generalizada
No existen pruebas de laboratorio específicas para diagnosticar la Ansiedad Generalizada.
Sin embargo, el médico puede realizar pruebas físicas o solicitar exámenes de laboratorio para descartar otras condiciones que pueden causar síntomas similares, como problemas de tiroides o enfermedades cardíacas.
En algunos casos, se puede realizar una evaluación psicológica, que puede incluir cuestionarios o escalas de autoinforme para evaluar la intensidad y la naturaleza de los síntomas de ansiedad.
Diagnóstico Diferencial de la Ansiedad Generalizada
La ansiedad generalizada (AG) es un trastorno que se caracteriza por preocupaciones crónicas e incontrolables. Sin embargo, hay otros trastornos de ansiedad que pueden presentar síntomas similares. Aquí están algunos de ellos:
- Trastorno de Pánico: Este trastorno se caracteriza por síntomas de ataques de ansiedad repentinos y recurrentes. Los ataques de ansiedad (o ataques de pánico) son episodios intensos de miedo extremo que alcanzan su pico en minutos. Aunque las personas con AG pueden experimentar ataques de pánico, no son una característica definitoria de este trastorno.
- Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC): El TOC se caracteriza por síntomas en forma de pensamientos obsesivos incontrolables y comportamientos compulsivos que se realizan para aliviar la ansiedad. A diferencia de la AG, donde la preocupación puede ser sobre una variedad de temas, las obsesiones en el TOC suelen ser más específicas.
- Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT): Este trastorno puede desarrollarse después de experimentar un evento traumático. Los síntomas pueden incluir recuerdos angustiantes del evento, pesadillas y reacciones intensas a cosas que recuerdan el trauma. Aunque la AG puede ser desencadenada por el estrés, no está específicamente ligada a un evento traumático.
- Trastorno de Ansiedad Social (TAS): El TAS se caracteriza por un miedo intenso y persistente de situaciones sociales o de rendimiento en las que la persona puede ser juzgada. Este miedo a la humillación o el ridículo puede llevar a evitar situaciones sociales. A diferencia de la AG, el miedo en el TAS está específicamente vinculado a las interacciones sociales.
- Fobia Específica: Las fobias específicas se refieren a un miedo irracional y extremo a una situación o objeto específico, como volar o las alturas. A diferencia de la AG, las personas con fobias específicas no están constantemente preocupadas y sólo experimentan ansiedad en presencia del objeto o situación temida.
Todos estos trastornos pueden presentar síntomas de ansiedad, pero difieren en los desencadenantes de la ansiedad, la naturaleza de los síntomas, y el tratamiento apropiado. Si experimentas síntomas de ansiedad, es importante buscar ayuda de un profesional de la salud mental para obtener un diagnóstico y tratamiento precisos.
Mitos y realidades sobre el diagnóstico de la Ansiedad Generalizada
Existen varios mitos y malentendidos sobre el diagnóstico de la Ansiedad Generalizada. Aquí desmentimos algunos de los más comunes:
- Mito: La Ansiedad Generalizada es simplemente el resultado de una personalidad «nerviosa».
- Realidad: Es un trastorno de salud mental serio y no es simplemente una característica de la personalidad. Requiere un diagnóstico y tratamiento profesional.
- Mito: Si no tienes ataques de pánico, no tienes un trastorno de ansiedad.
- Realidad: Aunque los ataques de pánico son un síntoma de algunos trastornos de ansiedad, no son un síntoma de la Ansiedad Generalizada. La preocupación crónica y excesiva es el síntoma principal de este trastorno.
- Mito: La Ansiedad Generalizada es el resultado de una mala crianza o de eventos traumáticos en la infancia.
- Realidad: Aunque los eventos traumáticos pueden contribuir al desarrollo de trastornos de ansiedad, no son la única causa. La Ansiedad Generalizada puede ser el resultado de una combinación de factores genéticos, biológicos y ambientales.
5. Tratamiento de la Ansiedad Generalizada
Una vez diagnosticada, podemos empezar el tratar el trastorno de ansiedad generalizada.
Veamos cómo.
Opciones de tratamiento: Medicación y Terapia
El tratamiento de la Ansiedad Generalizada suele implicar una combinación de medicación y terapia.
En cuanto a la medicación, los principales medicamentos utilizados, que son antidepresivos, son un grupo formado por distintas moléculas. En particular, los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS, como fluoxetina, paroxetina, sertralina, citalopram, escitalopram o fluvoxamina) y los inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN como venlafaxina, desvenlafaxina -Pristiq- o duloxetina), se utilizan comúnmente para tratar la Ansiedad Generalizada.
También los antidepresivos atípicos son útiles: la vortioxetina (Brintellix), el bupropion, la mirtazapina y la trazodona (Deprax), participan habitualmente del tratamiento.
Los medicamentos ansiolíticos, como las benzodiazepinas (diazepam, lorazepam, alprazolam (Trankimazin), bromazepam (Lexatin)…), también pueden ser útiles, aunque generalmente se utilizan a corto plazo debido al riesgo de dependencia. A veces se utilizan pastillas para dormir como el lormetazepam para mejorar el insomnio.
La terapia cognitivo-conductual (TCC) es una forma de terapia que se utiliza frecuentemente para tratar la Ansiedad Generalizada. Esta terapia ayuda a las personas a identificar y cambiar patrones de pensamiento negativos y comportamientos que pueden estar contribuyendo a su ansiedad.
Técnicas de autoayuda y cambios en el estilo de vida
Además de la medicación y la terapia, hay varias técnicas de autoayuda y cambios en el estilo de vida que pueden ayudar a manejar la Ansiedad Generalizada y a cuidar a la salud mental en general.
Estos pueden incluir:
- Técnicas de relajación: La meditación (por ejemplo un tipo que es el mindfulness), la respiración profunda, el yoga y otras técnicas de relajación pueden ayudar a reducir los síntomas de la ansiedad.
- Ejercicio regular: El ejercicio físico regular puede ayudar a reducir la ansiedad al aumentar la producción de endorfinas, que son químicos en el cerebro que actúan como analgésicos naturales.
- Dieta saludable: Una dieta equilibrada puede ayudar a mantener los niveles de energía estables y a mejorar el estado de ánimo.
- Evitar la cafeína y el alcohol: El café, a través de la cafeína, puede aumentar la ansiedad. Algo parecido sucede con el alcohol, que puede dar depresión y ansiedad por sí sólo.
6. Vivir con Ansiedad Generalizada
¿Cómo es el día a día de una persona que padece este trastorno?.
¿Qué podemos hacer para echar una mano?.
Vamos a ver con detalle estas preguntas.
Consejos para manejar la Ansiedad Generalizada
Vivir con Ansiedad Generalizada puede ser un desafío, pero hay varias estrategias que pueden ayudar a manejar los síntomas y mejorar la calidad de vida:
- Practica técnicas de relajación: Técnicas como la meditación, la respiración profunda y el yoga pueden ayudar a reducir los síntomas de la ansiedad.
- Mantén una rutina regular: Tener una rutina diaria puede proporcionar una sensación de normalidad y control, lo que puede ayudar a reducir la ansiedad.
- Haz ejercicio regularmente: El ejercicio físico regular puede ayudar a reducir la ansiedad al liberar endorfinas, los químicos del cerebro que actúan como analgésicos naturales.
- Duerme lo suficiente: La falta de sueño puede aumentar los síntomas de la ansiedad. Intenta mantener una rutina de sueño regular y crea un ambiente propicio para el descanso.
- Come una dieta saludable: Una dieta equilibrada puede ayudar a mantener los niveles de energía estables y mejorar el estado de ánimo.
Cómo apoyar a un ser querido con Ansiedad Generalizada
Si tienes un ser querido que sufre de Ansiedad Generalizada, aquí hay algunas formas con las que puedes brindarle apoyo:
- Educa a ti mismo: Aprende todo lo que puedas sobre la Ansiedad Generalizada para que puedas entender mejor lo que tu ser querido está experimentando.
- Sé comprensivo: Reconoce que la Ansiedad Generalizada es una enfermedad real y valida los sentimientos de tu ser querido.
- Fomenta el tratamiento: Anima a tu ser querido a buscar ayuda profesional si aún no lo ha hecho.
- Sé paciente: Recuerda que la recuperación lleva tiempo y cada persona avanza a su propio ritmo.
7. Recursos y Apoyo para la Ansiedad Generalizada
Organizaciones y grupos de apoyo
Existen varias organizaciones y grupos de apoyo que pueden proporcionar ayuda y recursos para las personas que viven con Ansiedad Generalizada. Algunas de estas organizaciones incluyen:
- Asociación Americana de Ansiedad y Depresión (ADAA): Ofrece una gran cantidad de recursos en línea, incluyendo información sobre la Ansiedad Generalizada, consejos para manejar la ansiedad, y un directorio de terapeutas.
- Federación Mundial de Salud Mental (WFMH): Proporciona información online sobre trastornos de salud mental, incluyendo la Ansiedad Generalizada, y enlaces a recursos y organizaciones en diferentes países.
- Grupos de apoyo locales y en línea: Muchas comunidades tienen grupos de apoyo para personas con trastornos de ansiedad, y también hay numerosos grupos de apoyo en línea y foros donde las personas pueden compartir sus experiencias y consejos.
Cómo buscar ayuda profesional
Si crees que puedes estar sufriendo de Ansiedad Generalizada, es importante buscar ayuda profesional. Aquí hay algunos pasos que puedes seguir:
- Habla con tu médico de cabecera: Tu médico puede realizar una evaluación inicial, proporcionarte información sobre esta enfermedad, y derivarte a un especialista si es necesario.
- Ir a consulta con un psiquiatra: Un buen psiquiatra puede realizar una evaluación más detallada y proporcionarte un plan de tratamiento.
- Busca un psicoterapeuta: Un terapeuta puede ayudarte a desarrollar habilidades de afrontamiento y estrategias para manejar la ansiedad.
Recuerda, no estás solo y hay ayuda disponible. No dudes en buscar apoyo si lo necesitas.
Si crees que puedes estar sufriendo de Ansiedad Generalizada, o si tienes un ser querido que está lidiando con este trastorno, te animo a que busques ayuda profesional. No estás solo y hay recursos y apoyo disponibles para ayudarte a manejar este desafío.
Recuerda, no hay nada de malo en buscar ayuda. De hecho, buscar ayuda es un signo de fortaleza y el primer paso hacia la recuperación.
No dudes en dar ese paso. Tu salud mental es importante y mereces vivir una vida plena y satisfactoria, libre de la carga de la ansiedad.
Sobre el autor
Marc Planella
Nº de colegiado: 080836943
- Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Barcelona - Unidad docente Hospital Vall d'Hebron (2001).
- Especialista en Psiquiatría por Sant Joan de Déu - Servicios de Salud Mental (2002 - 2006).
- Formación específica universitaria en tratamiento de depresiones unipolares y bipolares.
- Especialista universitario en psiquiatría forense.
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