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ToggleSi crees que los psicofármacos son peligrosos… necesitas leer esto
A estas alturas del siglo XXI, podría parecer que los mitos sobre los medicamentos psiquiátricos están superados. Pero no. Todavía hoy muchos pacientes se resisten a iniciar un tratamiento con psicofármacos porque han oído cosas como «los antidepresivos enganchan» o «te vuelven zombi». Como psiquiatra, me encuentro cada día con miedos, dudas y prejuicios que dificultan una recuperación eficaz. Por eso, en este artículo quiero desmontar los 10 mitos más frecuentes sobre los medicamentos psiquiátricos y explicar, con claridad, cuál es la realidad clínica.
Mito 1: «Los antidepresivos enganchan»
Realidad: No, los antidepresivos no generan adicción. No producen el refuerzo inmediato, la dependencia física ni la necesidad compulsiva de consumo que sí vemos en sustancias adictivas como las benzodiacepinas o el alcohol. Puedes estar tiempo tomándolos, pero eso no significa que seas adicto.
Mito 2: «Tomar medicación es señal de debilidad»
Realidad: Tratarse no es rendirse. Al contrario: es un acto de responsabilidad y cuidado. Nadie cuestiona tomar metformina para la diabetes o antihipertensivos para la tensión alta. Pues lo mismo: si tienes una alteración neuroquímica que te impide funcionar con normalidad, tratarla no te hace más débil, sino más libre.
Mito 3: «Los antidepresivos cambian tu personalidad»
Realidad: Lo que cambia tu personalidad es estar deprimido. Si la medicación es adecuada, no deberías dejar de ser tú, sino volver a serlo. Otra cosa es que aparezca embotamiento emocional, algo que puede pasar con algunos fármacos y que se soluciona ajustando la dosis o cambiando el tratamiento.
Mito 4: «Una vez empiezas, no puedes dejarlos nunca»
Realidad: El tratamiento antidepresivo tiene un principio y un final. Tomar antidepresivos no es para toda la vida salvo en casos concretos (por ejemplo, depresiones recurrentes). En la mayoría de casos, se puede retirar de forma progresiva sin problema.
Mito 5: «Te vuelven zombi o te dejan plano»
Realidad: Si la medicación te deja sin emociones o te sientes «zombi», algo no está bien ajustado. Puede ser la dosis, el tipo de fármaco o la interacción con otros. No es lo normal. El objetivo es que recuperes funcionalidad, no que pierdas tu capacidad emocional.
Mito 6: «Si tomas medicación psiquiátrica, es que estás muy mal»
Realidad: Hay personas que toman antidepresivos o ansiolíticos sin estar en una crisis grave. Simplemente porque los síntomas afectan a su calidad de vida. No hay que tocar fondo para pedir ayuda. Tratarse a tiempo evita complicaciones mayores.
Mito 7: «Los antipsicóticos son solo para esquizofrenia»
Realidad: Aunque su nombre asuste, los antipsicóticos se utilizan en muchos otros cuadros: trastorno bipolar, depresión resistente, insomnio grave, trastornos de conducta, etc. Se usan en dosis más bajas y con otros objetivos. No implica que tengas una enfermedad psicótica.
Mito 8: «Los ansiolíticos curan la ansiedad»
Realidad: No. Alivian los síntomas a corto plazo, pero no solucionan el origen del problema. Por eso suelen combinarse con psicoterapia, técnicas de regulación emocional o incluso antidepresivos, según el caso.
Mito 9: «La medicación solo tapa el problema»
Realidad: En muchos casos, el fármaco permite estabilizar al paciente para que pueda abordar el problema real. Si tienes una depresión severa, es muy difícil hacer cambios vitales o ir a terapia si no puedes ni salir de la cama. No tapa: posibilita.
Mito 10: «Los efectos secundarios siempre son peores que el beneficio»
Realidad: Todos los medicamentos tienen efectos secundarios. Pero la mayoría son leves y transitorios. Y si uno no va bien, se cambia. Hay muchas opciones. Lo importante es no quedarse sufriendo por miedo a probar.
¿Qué conclusión podemos sacar de los mitos de los medicamentos psiquiátricos?
La desinformación es uno de los mayores enemigos de la salud mental.
Cuantos más mitos desmontemos, más personas podrán acceder a un tratamiento eficaz sin culpa ni miedo.
Si tienes dudas sobre tu medicación, lo mejor es consultarlo con un profesional cualificado. Y si estás buscando ese primer paso, puedo ayudarte.
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Sobre el autor
Marc Planella
Nº de colegiado: 080836943
- Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Barcelona - Unidad docente Hospital Vall d'Hebron (2001).
- Especialista en Psiquiatría por Sant Joan de Déu - Servicios de Salud Mental (2002 - 2006).
- Formación específica universitaria en tratamiento de depresiones unipolares y bipolares.
- Especialista universitario en psiquiatría forense.
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